La plaza de las Bernardas, junto con el convento de las Bernardas y el Palacio Arzobispal, conforma uno de los espacios más especiales de Alcalá de Henares.
Convento de las Bernardas
El monasterio de San Bernardo, conocido popularmente como el convento de las Bernardas, es un magnífico edificio y una obra cumbre del barroco español. El cardenal Bernardo Sandoval y Rojas fundó el monasterio en 1617 y el edificio se terminó en 1636. Fue diseñado por Juan Gómez de Mora, uno de los grandes arquitectos del barroco. La iglesia tiene una fachada sobria y austera que contrasta vivamente con su interior amplio y lleno de luz. La parte alta del edificio alberga el excelente Museo de Arte Religioso.
Este convento cisterciense se creó con veinticuatro monjas de clausura; cuando se cerró en el año 2000, las seis monjas que quedaban fueron trasladadas a otro convento mayor.
En la plaza de las Bernardas también encontramos el Museo Arqueológico Regional de Madrid. El museo se ubica en el antiguo convento dominico de la Madre de Dios, que es uno de los mayores conjuntos conventuales de Alcalá de Henares. El conjunto comprendía la iglesia y el convento propiamente dicho, donde residían los frailes. Su construcción se llevó a cabo entre los siglos XVII y XVIII frente al palacio arzobispal, junto a la nueva puerta que se abrió en la muralla de la villa (el actual arco de San Bernardo).
Una curiosidad…
La cúpula de la iglesia de las Bernardas tiene forma oval y es la mayor de su género construida en España.
El Palacio Arzobispal
Alcalá de Henares fue una villa amurallada no solo por motivos de defensa, sino también económicos, ya que en las diferentes puertas de la muralla se cobraba el denominado portazgo. Las murallas fueron edificadas en el siglo XIV por Pedro Tenorio, aunque actualmente solo se mantiene un tramo con dieciséis torres que rodeaba el Palacio Arzobispal. Los visitantes pueden subir a la muralla medieval y visitar el interior de las torres del recinto amurallado del antiguo alcázar.
El Palacio Arzobispal era la residencia de los arzobispos de Toledo en sus visitas a Alcalá. Adosado a las murallas de la ciudad, tiene su origen en una fortaleza mudéjar del siglo XII y se le realizaron diversas ampliaciones hasta el siglo XIX. Debido a un desafortunado incendio, solo se conserva una de las fachadas, la renacentista. Entre sus arquitectos destaca Alonso de Covarrubias, que trazó lo que hoy es la fachada principal del conjunto, así como el desaparecido patio de Fonseca y su escalera. Actualmente el palacio alberga la sede del Obispado de Alcalá.
Una curiosidad…
El Palacio Arzobispal es famoso por ser el lugar de la primera entrevista entre los Reyes Católicos y Cristóbal Colón.